Seguimos con el plan lector y esta vez nos toca adentrarnos, de la mano del poeta Jorge Luis Borges, en el Laberinto donde habita el Minotauro. Os dejo, además, una reflexión de otro de nuestros mejores y sin embargo poco valorados poetas, el maestro José Bergamín, que dijo: "El que sólo busca la salida no entiende el laberinto, y, aunque la encuentre, saldrá sin haberlo entendido". Así que vamos nosotros a intentar entender el laberinto que nos propone el poeta, sin preocuparnos mucho de salir corriendo de él.
No habrá nunca una puerta. Estás adentro
Y el alcázar(1) abarca el universo
Y no tiene ni anverso ni reverso(2)
Ni externo muro ni secreto centro.
No esperes que el rigor de tu camino
Que tercamente se bifurca(3) en otro,
Que tercamente se bifurca en otro,
Tendrá fin. Es de hierro tu destino
Como tu juez. No aguardes la embestida
Del toro que es un hombre y cuya extraña
Forma plural da horror a la maraña(4)
De interminable
piedra entretejida.
No existe. Nada esperes. Ni siquiera
En el negro crepúsculo la fiera.
No existe. Nada esperes. Ni siquiera
En el negro crepúsculo la fiera.
(1) alcázar: fortaleza; casa real o habitación del príncipe, esté o no fortificada.
(2) reverso: parte opuesta al frente de una cosa, parte trasera opuesta a la delantera o anverso, sobre todo en las monedas y medallas.
(3) bifurcar: dividirse en dos ramles, brazos o puntas.
(4) maraña: lugar cubierto de maleza que lo hace impracticable; y situación o asunto intrincado o de difícil salida.
Jorge Luis Borges incluye este soneto, titulado "Laberinto", en su libro de poemas "Elogio de la sombra", publicado en 1969.
El
poema, desde el título, alude al Laberinto de Creta, el palacio de la
Doble Hacha, que eso es lo que significa "laberinto" en griego. El poeta
se refiere todo el rato a una segunda persona que no sabemos quién es,
porque no nos lo dice, por lo que debemos pensar que somos nosotros
mismos, los lectores, los destinatarios de estos versos. Si vamos al
mito, nosotros, los lectores, seríamos el héroe Teseo que debe
enfrentarse a la fiera, a Asterión, que era el nombre propio del
Minotauro.
1.- ¿A qué corresponde la descripción del primer cuarteto?
2.-
¿Por qué crees que se repite en el segundo cuarteto el verso "Que
tercamente se bifurca en otro"? ¿Se tratará de un error o el poeta habrá
querido decirnos algo repitiendo el verso, y en este caso qué habrá
querido decirnos?
3.- ¿Que significado tienen los versos de los tercetos "No aguardes la embestida / Del toro que es un hombre... No existe"?
4.-
El poeta está en este soneto desmitificando, es decir, privando de
algunos elementos míticos, la historia que conocemos del Laberinto,
Teseo y el Minotauro, el hilo de Ariadna... Si Teseo es el lector, el
Minotauro no existe, a Ariadna ni se la menciona ni tampoco el hilo que
nos permitiría salir de allí, ¿queda algo de la historia? ¿qué nos
queda?
Espero, como de costumbre, vuestros comentarios y respuestas:
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