El poeta Juan de la Cueva versificó y publicó en 1587 la leyenda de Rómulo y Remo que Tito Livio había transmitido en prosa latina en su obra Ab urbe condita (Desde la fundación de la Ciudad), romanceándola en versos castellanos octosílabos con rima asonante en -ea en los versos pares del siguiente modo:
Con las vírgenes vestales(1) está la
hermosa Rea,
Que su tío el rey Amulio allí la tiene
por fuerza,
Desterrándole a su padre contra
justicia y clemencia,
Por quitarle el reino Albano(2), que era
suyo por herencia (…)
La triste Rea quedando huérfana y por
fuerza opresa,
La cual consumía su vida lastimada de
su ofensa,
Pidiendo venganza al cielo de su
estrechez y miseria,
Desesperada del
miedo que darle remedio pueda.
Así pintó Rubens el acoso del dios Marte a la doncella Rea Silvia junto al fuego sagrado de la diosa Vesta.
Así pintó Rubens el acoso del dios Marte a la doncella Rea Silvia junto al fuego sagrado de la diosa Vesta.
Estando así en el convento de la
religiosa Vesta(3),
Entre su virgíneo coro la virgen vestal
profesa,
El hijo del alto Jove(4), que preside en
las peleas,
El sangriento horror, dejando las armas
y trompas bélicas,
A la terneza de amor todo su furor
sujeta,
Viendo la beldad(5) divina de la virgen vestal
Rea;
Y forzado al dulce fuego, que al más
fuerte señorea,
El poderoso dios Marte ciego y cativo(6)
se entrega;
Que en las contiendas de amor ninguna
fuerza aprovecha.
Dio lugar a la memoria el dios fiero de la guerra,
Dio lugar a la memoria el dios fiero de la guerra,
Trabando consigo mismo de las guerras
la más fiera,
Entre amor y su deseo, que el uno y
otro le apremian,
Dándole el amor esfuerzo, y el deseo temor y pena;
Natural cosa al que ama, es temer lo que desea,
Cual al dios
Marte, sucede, que lo que desea, recela.
Puesto el tracio dios(7) horrible en esta
horrible contienda,
Temiendo y orando a un punto, cosa en
el que ama cierta,
Sujeto a su voluntad rompió del temor
la cuerda
Dejando al libre deseo suelta a su
querer la rienda:
Y así puesto en asechanza a la vestal Rea
acecha,
Y hallándola sola
un día a gozar de ella se apresta;
Que no le otorga su fuego, para
aguardar más, licencia.
Llegó a ella y por la mano, sin
descubrirse quién era,
La asió, y ella pavorosa la voz mal
formada arrecia.
Forcejeando, y resistiendo enflaqueció
en la defensa;
Que no puede fuerza humana resistir
divina fuerza.
Tembló el templo, bramó el cielo, estremecióse
la tierra,
De horror volvió atrás el Tíber escondiendo
la cabeza,
Y al centro lodoso y hondo se dejó
calar de pena,
Turbando las claras hondas revolviendo
las arenas,
Dando testimonio en esto del agravio
hecho a Vesta.
Habiendo Marte a su gusto gozado de la
doncella,
Le dice quién es, y en vuelo se
desapareció de ella,
Quedando la vestal virgen sin el don
que más se precia.
Y así pinto el encuentro del dios Marte y la virgen vestal Jacques Blanchard en torno a 1630.
Y de dos hijos preñada, indicio de que era rea (8);
Y así pinto el encuentro del dios Marte y la virgen vestal Jacques Blanchard en torno a 1630.
Y de dos hijos preñada, indicio de que era rea (8);
Que las ocultas maldades el mismo mal
las revela,
Cual en este ayuntamiento vino a
sucederle a Rea,
Quedando por rastro de él la preñez, en
que se vea:
La cual aunque quedó oculta, fue,
creciendo, manifiesta;
Llegando el tiempo que Juno sacó a ver
la luz febea(9)
Dos bellos niños de un parto, no sin
confusión y afrenta
De las vírgenes vestales, que al rey el
caso le cuentan.
El cual oyendo el suceso, sin que punto
se detenga,
Renovando el odio antiguo ordenó, ardiendo
en crueza(10),
Cómo padezca la madre, y los dos hijos
perezcan:
Y así la mandó poner en una prisión
estrecha
Donde acabase la vida en soledad y
miseria.
Llamó luego dos criados, de quien
confiarse pueda,
Y contándoles el caso los dos niños les
entrega
Para que al Tíber los echen adonde
ahogados mueran.
Los criados diligentes, las almas de
dolor llenas,
Reciben los dos infantes, para darles
muerte fiera.
Cumpliendo el real mandato van a
ejecutar la pena
En los tiernos inocentes, que en
naciendo a morir llevan
Por la culpa de su madre, que a su
inocencia condena
Y la tiranía del tío, que en ellos su
odio venga,
Aunque el disponer del cielo de ellos
otra cosa ordena;
Porque llegados al río donde la triste
tragedia
Ha de ser de los dos niños, según orden
mortal cierta,
Iba el río tan crecido tendido por la
ancha vega,
Que poder llegar al hondo de la
corriente les veda(11);
Y así cumpliendo el mandato del rey,
los dos niños dejan
Echados dentro del agua, y con esto dan
la vuelta.
Mas vuelto a piedad el Tíber por la
divina clemencia,
Recogió en sí la creciente, los niños
dejando en tierra
Entre las ovas(12) y lamas(13) llorando su
cruda estrella.
Acudió al llanto una loba, no movida
como fiera,
Mas de humano sentimiento, como si
aquello sintiera,
Y lamiéndoles el lodo, con regalo entre
ellos se echa,
Y a cada niño en su boca la loba aplicó
una teta.
En este piadoso oficio esta fiera se
recrea,
O guiada de los dioses, o movida de
terneza.
Sucedió que como iba y volvía luego
presta(14),
Esto hizo tantas veces siguiendo una
misma senda,
Que de Faustillo, un pastor, fue vista
y tenida en cuenta;
Y así siguiéndole un día por los pasos
que iba ella,
La vio tendida en el suelo, y a los
niños a sus tetas,
Usando del mismo oficio que si ella los
pariera.
Aguardó el pastor Faustillo, que la
fiera hiciese ausencia,
Y luego que los dejó a los tiernos
niños llega
Movido a piedad humana, tomando ejemplo
en la fiera.
Se cargó de los dos niños y a su cabaña
los lleva,
Y a Laurencia su mujer todo el suceso
le cuenta
Mandándoselos criar como si sus hijos
fueran.
Y así pintó Rubens a los gemelos Rómulo y Remo amamantados por la loba. Al fondo a la derecha, el pastor Fáustulo, que los recogerá. A la izquierda la madre de los gemelos, Rea Silvia, y una figura masculina que personifica al río Tíber.
Éstos son Rómulo y Remo, del romano
Imperio cepa(15),
Por quien fue fundada Roma que fue del
mundo cabeza.
oOo
Espero vuestros comentarios sobre los elementos dramáticos del romance. Podéis hacérmelos llegar en papel o utilizando el espacio reservado a los comentarios al pie de esta entrada.
NOTA BENE:
oOo
Espero vuestros comentarios sobre los elementos dramáticos del romance. Podéis hacérmelos llegar en papel o utilizando el espacio reservado a los comentarios al pie de esta entrada.
NOTA BENE:
(1) Vírgenes vestales: sacerdotisas de la diosa Vesta a la que consagraban su virginidad mientras duraba su sacerdocio y cuyo fuego ardiente, que simbolizaba el del hogar y posteriormente el espíritu de Roma, debía arder constantemente. Se consideraba un honor al que sólo podían acceder las jóvenes patricias.
(2) reino Albano: el reino de Alba Longa, la ciudad predecesora de Roma, que fue fundada por el hijo de Eneas, Ascanio, también llamado Julo, por lo que es antepasado remoto de la familia Julia.
(3) diosa Vesta: es la griega Hestia, diosa del hogar, por lo que es hermana de Júpiter y de Juno. Pese a haber sido requerida por Neptuno y por Apolo, obtuvo de Júpiter la gracia de guardar siempre su virginidad. En lugar de ser una divinidad personal, es una encarnación de la idea o personificación del espíritu del hogar.
(3) diosa Vesta: es la griega Hestia, diosa del hogar, por lo que es hermana de Júpiter y de Juno. Pese a haber sido requerida por Neptuno y por Apolo, obtuvo de Júpiter la gracia de guardar siempre su virginidad. En lugar de ser una divinidad personal, es una encarnación de la idea o personificación del espíritu del hogar.
(4) Jove: heterónimo de Júpiter, de donde deriva el adjetivo "jovial" -que está poseído por el espíritu alegre de Jove- y el día de la semana consagrado a este planeta/dios: el jueves.
(5) beldad: belleza
(6) cativo: (Según el diccionario de la RAE): Dicho de una persona: Que no tiene cualidades físicas, intelectuales o morales dignas de aprecio.Malo, infeliz, desgraciado.
(7) el tracio dios: alusión a Marte, el Ares griego, dios de la guerra, hijo de Júpiter y de Juno, por lo que pertenece a la segunda generación de dioses olímpicos. Este dios habitaba en Tracia, país semisalvaje, de clima duro, rico en caballos y recorrido por pueblos guerreros. Personifica la guerra y la violencia. Al violar a la vestal Rea Silvia, se convierte en el padre de Rómulo y Remo, y, por lo tanto, del pueblo romano, que va a estar marcado desde su nacimiento por el estigma de la guerra.
(8) rea: acusada, culpada (juego de palabras con su nombre propio Rea)
(9) luz febea: luz de Febo, heterónimo de Apolo, dios del Sol.
(9) luz febea: luz de Febo, heterónimo de Apolo, dios del Sol.
(10) crueza: (palabra que ya no se usa) crueldad.
(11) vedar: prohibir, impedir.
(12) ova: alga verde del mar o de los ríos.
(13) lama: cieno o lodo de algunos ríos.
(14) presto: rápido.
(15) cepa: Tronco u origen de una familia o linaje.
El romance tiene varios elementos dramáticos, primero Amulio obliga a Rhea Silvia a convertirse en sacerdotisa vestal para que no pueda tener hijos, después está el dios Marte que la viola, y cuando Amulio se entera de que ella a tenido dos hijos la encierra en una celda y manda matar a los hijos para poder quedarse con el trono que le quitó a su hermano. Si no fuera porque tuvieron suerte habrían muerto ahogados y además la loba podría haberlos atacado.
ResponderEliminarPaula Muñoz Pico Bachiller 1ºC
Este romance relata el mito de Rómulo y Remo. Presenta muchos elementos dramáticos, empezando por la relación entre el Rey Amulio (tío de Rhea) y su padre, porque Amulio destierra a su hermano, dejando así huérfana y presa a su sobrina. Rhea, la hermosa joven pierde la virginidad con el Dios Marte, que abusa de ella. Pero, sin duda, en mi opinión el dramatismo aparece despúes de que la divinidad se aprovechase de Rhea. Cuando nacen los dos gemelos a los que les depareba un oscuro destino. Por suerte; una loba encuentra a los dos hermanos a la orilla del río y los cuida como si fuesen sus cachorros. Hasta que un buen día, Faustillo, un pastor, y su mujer acogen a los niños en su casa.
ResponderEliminarCarmen Harvey Sainz de la Maza B1ºC
Gracias por vuestros comentarios, Paula y Carmen.
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